Hillary Clinton reconoce su derrota. Foto de "DiarioCorreo". |
Logotipo del Partido Republicano, quien salió muy reforzado de las elecciones. Foto de "Wikipedia". |
En febrero del año pasado, un viejo senador "socialista" (sí, la palabra más odiada en EE. UU. después de comunista) del este del país, Bernie Sanders, arrasaba las encuestas tras perder por un margen de 0,25 puntos ante Hillary Clinton en los Caucus de Iowa, los primeros del proceso, pero, en estas mismas asambleas, el que ya entonces todos predecían como ganador entre los conservadores, Donald Trump, perdía la votación y quedaba relegado a la tercera posición. Este hecho provocó que la prensa estadounidense pusiera toda su esperanza en Rubio y Cruz que, al final, acabaron perdiendo ante Trump.
Caucus de Iowa, 2016. Foto de "NPR". |
Bernie Sanders en un mitin en Iowa. Foto de "blogimg". |
Conforme la campaña avanzaba y se iba moviendo a los estados más poblados, llegó el Supertuesday, que pulverizó las opciones de Rubio y, al final, lo de Iowa sólo fue un caso aislado: Trump ganó con amplia mayoría en las filas conservadoras y Clinton también ganó, de forma más apretada, gracias a los estados sureños, donde vive una mayoría de latinos y afroamericanos, a costa de perder votos en el norte y el cinturón industrial de los grandes lagos. Aquí teneís el enlace al video en el cual Rubio anuncia su retirada.
Sigamos, ¿no? Bien, llegamos a las National Conventions de ambos partidos, conservadores en Cleveland y demócratas en Filadelfia, los dos eligiendo esos lugares porque eran ciudades de dos estados clave en la elección general; mala jugada para los demócratas que perdieron Pensilvania, genial para los republicanos, que arrasaron en Ohio, y ya sabemos el dicho: "Lo que hace Ohio, lo repite la nación", y vaya si lo repitió. Si la RNC ya fue mucho mejor de lo esperada, la DNC no se quedó corta y Hillary salió bastante reforzada.
RNC 2016, Cleveland, Ohio. Foto de "c4dt.com". |
DNC, Filadelfia, Pensilvania. Foto de "huffingtonpost.com" |
Podría hablar de los debates, pero se podría decir poco de ellos: Clinton destacó por el contenido, Trump por la forma. Ambos candidatos destacaron porque a medida que avanzaban los debates peor feeling había entre ellos. Aquí tenéis el enlace al video del segundo debate presidencial.
Al fin, llegamos a noviembre, sí, ese mes fatídico para ambos en que vimos el video donde Trump decía sobre las mujeres "When you are a star, you can grab them by the p***y" o lo que es lo mismo "Cuando eres una estrella, puedes agarrarlas por el c**o", pero Hillary tampoco se quedaba corta, pues fuera por Hackeo o no de Rusia, la comprometida información que el Partido Demócrata guardaba sobre ella acabó saliendo a la luz.
Trump realiza un comentario obsceno sobre las mujeres.
Ya estamos a 8 de noviembre, conocido como Election Day, ese martes laborable en que poco menos de la mitad de los estadounidenses tendrá tiempo físico para ir a la urnas. Las encuestas están aún más apretadas si cabe, los candidatos y los partidos, nerviosos, nerviosos por una noche electoral en la que, en teoría, habrá que esperar hasta el recuento del último voto en California para saber si gana ella o él. Empieza el recuento y los demócratas reciben varapalo tras varapalo mientras los conservadores están que no se lo pueden creer; según el escrutinio, Hillary pierde Florida, Pensilvania, Ohio, Iowa, Michigan, Wisconsin y otros muchos estados considerados swing, que se inclinan del lado del Partido Republicano. Cuando el recuento llega a California, el estado más occidental, el descalabro ya era un hecho, Donald Trump era el Presidente Electo de los Estados Unidos de América, aun siendo la demócrata quien había ganado el voto popular.
Resultado final de las elecciones en EE.UU. Foto de "realclearpolitics". |
Bien, dicho lo anterior, Hillary Clinton se centró excesivamente en buscar votos y apoyo en la minoría latina y afroamericana, que después, sobre todo la primera, no le dieron el apoyo que necesitaba, incluso votaron más de lo previsto a Trump y, por contra, se olvidó completamente de los estados de los Grandes Lagos del cinturón industrial norteamericano como Michigan, Pensilvania e Iowa, que, casualidad o no, apoyaron de forma muy mayoritaria a su rival Sanders en las primarias y no la apoyaron a ella en la elección general. Trump, por su parte, hizo una campaña muy mediática y "patriota", que llegó al corazón de los americanos de esas zonas, quienes veían cómo las grandes compañías como Ford se llevaban sus fábricas a México o China, y claro, si esas típicas familias americanas tienen que elegir entre Trump o la indigencia, señores míos, hasta yo mismo habría elegido a Trump.
Latinos celebrando la victoria de Trump. Foto de "LatinTimes". |
Seguidores demócratas lloran la derrota de Clinton. Foto de "People". |
Clinton acepta su derrota en la noche electoral.
Independientemente de las medidas que esté tomando actualmente Trump, que para mi gusto son bochornosas, el pueblo americano conocía las reglas del juego antes de jugar, sabía que el voto popular no cuenta en la democracia americana, que lo que cuenta es el Colegio Electoral, y los americanos jugaron, jugaron ellos y ahora quien perderá, tristemente, seremos la humanidad y el medioambiente.
P. D.: Al final, el muro lo acabará pagando España...
Foto de "Twitter". |
...o peor si cabe, que hagamos nuestro propio muro.